viernes, 23 de marzo de 2012

El Pasaje Hernández

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Para mí el centro de Bogotá es otra ciudad dentro de la ciudad a la que me gusta ir cada vez que puedo a callejear sin rumbo fijo, con los ojos bien abiertos y preparada para la sorpresa que puede aparecer en cualquier esquina. 

El otro día salió el sol así que rápidamente agarré la cámara de fotos y me planté en la Plaza de Bolívar que viene a ser tan céntrica como la Plaza Mayor de Madrid. Y, como siempre hago, empecé a andar sin dirección esperando emocionada como una niña chiquita el regalo del día. Y ahí estaba el Pasaje Hernández, en la manzana ubicada entre las carreras 8 y 9 y las calles 12 y 13, con sus muros crema y aguamarina y ese aire moderno y parisino que le hacen presumir, y con razón, entre todos sus vecinos.

Hagamos un viaje en el tiempo. A finales del siglo XIX Bogotá era una ciudad de poco más de 100.000 habitantes que miraba con envidia a Europa, soñaba con sacudirse la pesada herencia colonial y ser como París, Londres y Milán. ¿Y cómo parecerse aunque fuera un poquito a estas grandes capitales? Construyendo en lo que era el eje central de la ciudad un galería comercial al estilo de las europeas. Los arquitectos Juan Ballesteros, Arturo Jaramillo y Gastón Lelarge se pusieron manos a la obra y diseñaron el Pasaje Hernández. Dividido en dos plantas con diecisiete locales cada una, en la de arriba se instalaron oficinas de médicos, ingenieros, abogados y también sastrerías, y abajo, almacenes y cigarrerías que vendían las mejores bebidas de importación.

De todo este glamour queda bien poco. En la planta baja ahora huele a pandebono y tamales y se vende ropa barata, minutos de celular, fotocopias y llamadas internacionales. Arriba la mitad de los locales están cerrados y tan sólo sobreviven dos o tres sastrerías y un zapatero. Pero sigue siendo una delicia pasear por este pasaje, oír crujir la madera de los suelos, ver colarse la luz por las marquesinas de vidrio de su techo, apoyarse en la barandilla de latón cromado, tomar fotos de sus faroles y helechos colgantes y soñar con románticas historias de la época.

Encontraréis más fotos del pasaje en mi página de facebook Colombia de una




16 comentarios:

  1. Otro rinconcito con encanto en medio de una ciudad tan grande como es Bogotá.

    Gracias Toya :)

    Un beso desde España con corazón colombiano.

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  2. A mi también me gustaba andar y andar horas por el centro de Bogotá cuando vivía allí. Hecho de menos esos paseos. Gracias por recordármelos.

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    1. Es una delicia andar por el centro de Bogotá! Gracias x tu mensaje :-)

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  3. ... mas que andar, pasear. Pasear y soñar, aunque de momento, solo soñar

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  4. Ojalá alguien se preocupe de que este pasaje se renueve, tome vida de nuevo, se adapte a la vida de hoy...eso sí, ¡manteniendo la magia que transmite en las fotos!. Un beso desde Argentina!!! Ángela.

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  5. Mis padres me llevaban alla de ninio porque el " dentista" como se le decia entonces al odontologo tenia su consultorio en el 2o. piso. terrible visita !!!!!! y yo no queria ir alla... entendible no ? Otra Muy Buena Cronica Toya. Sigue... sigue !

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    1. ¡Qué horror: el dentista! No me extraña que no quisieras ir. Ahora da pena porque el espacio está muy abandonado pero sigue teniendo un maravilloso encanto.
      Gracias por tu mensaje y por tus ánimos :-)

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  6. Que tristeza su estado. Bogotá tiene en el olvido su centro histórico, es el colmo. Pensar que en su glorioso pasado era prácticamente el único nicho donde se podían encontrar artículos de lujo, y los trajes a medida con tela importada de Paris. Que contraste tan barbaro ver esa cantidad de negocios de poca monta y tan deteriorado todo en general.

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    1. Sí Felipe, la verdad es que es una tristeza verlo así

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  7. Por cierto éste, el Hernandez junto con el pasaje Rivas fueron como los primeros centros comerciales de Bogotá.

    Si depronto te dán ganas alguna vez de conocer el Pasaje Rivas, uno de los lugares más emblemáticos de Bogotá para comprar artesanías de todo tipo del país.
    Horario: Todos los días de 9:00am a 7:00 pm
    Ubicación: Carrera 10 con Calle 10

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    1. Tengo previsto acercarme esta semana al Pasaje Rivas; estate atento que lo contaré en el blog!

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    2. Me gusta el olor de la madera, eso si ten paciencia con los vendedores jijijiji y date la vueltita por el restaurante. Un saludo y disfruta la semana santa en Bogota es la mejor época por que hay menos bullicio y sobretodo por el legado de Fanny Mickey con el festival de teatro.����

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  8. Recorrer el centro de Bogotá mi mejor plan.Estudie en dos colegios del centro uno el Remigton Camargo en la calle12con 4ª y en el Gimnasio Libertad (antiguo) en la calle 5ª con 6ª, ya no existen los absorbió la "modernidad",esto me dio la oportunidad de recorrer muchas veces las calles bogotanas. Toya buscaba el nombre del parque que mas me gusta y encontré a un personaje que conoce mas el centro que yo, es "COPETÍN" de Ernesto Franco. Todo por que a mi me gustaba La Rebeca y en mi memoria había un cómic del gamin Bogotano ósea Copetín en domingo de baño . Este es un cómic que desde los años 60s aparecía publicado en un diario.
    Me he alejado un poco de la idea que quería trasmitirte y era la de nombrar muchísimos lugares encantadores, parques,calles, pasajes,edificios, monumentos, museos, iglesias en fin que AQUI desde la lejanía me haces recoger mis pasos por mi cuidad natal. Y que ademas Seria una lista muy larga. Aaaaaa ya que te gusta la gastronomía hay en El centro un restaurante que se llama CECI era mi lugar preferido cuando había alguna celebración familiar. Comida tradicional y unos cuadros muy antiguos de paisajes bogotanos adornan el lugar. Quizá te guste. Creo que queda en la calle 11 entre décima y novena.
    Gracias Toya.

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    1. Voy a buscar a Copetín en internet y tomo nota del restaurante del que me hablas! Mil gracias

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