Diego me recibe con un gazpacho de leche de tigre con nopal acompañado de un ceviche de maíz y un pisco sour de ají mirasol. Así, nada más llegar ¿Pero quién es él? ¿Dónde estoy degustando estas delicias? ¿Qué he hecho yo para merecer esto? Diego García Vela es el propietario del Peruviano, el mejor restaurante peruano de Bogotá, y yo he tenido la inmensa suerte de que me invite a probar la nueva carta porque sabe que adoro su cocina.
Este festín culinario del que hoy soy protagonista continúa con un muchame de atún y de pescado blanco aderezado con limón, aceite de oliva y unos trocitos de aguacate, en reducción de chicha morada y lomo salteado y acompañado de palmito deshilachado de la selva. Literalmente lo devoro sobre unas crujientes tostaditas de pan al horno preparadas al estilo italiano con orégano, ajo y perejil. El pescado, a modo de sashimi japonés, se deshace en mi boca. A Diego le gusta jugar, fusionar sabores del mundo, sorprender a su clientela y no seguir las reglas. Así que que, si te animas a venir a su restaurante, ponte en sus manos y déjate llevar. No te arrepentirás. Yo es lo que hago siempre.
El menú continua con una patarashca, plato típico que en la selva peruana lo preparan con cualquier pescado de la zona. Diego ha escogido para este día un trozo de cherna que cocina envuelto en hojas de plátano o bijao, acompañado de cebollas, pimientos, tomate de árbol y chonto, servido con un timbal de plátano maduro y verde. Simplemente delicioso. De postre, un suspiro limeño a base de dulce de leche a la olla coronado con merengue italiano y con mucha canela. Qué maravilla.
En la nueva carta del Peruviano puedes encontrar arroces de la cocina chifa-peruana -que viene a ser la china-peruana-, como el aeropuerto, mezcla de pasta y arroz con chicharrón de pollo en reducción de chicha morada, el tapado con lomo de res, cebolla, aceitunas, huevo duro y ají panca o el de pato con un adobo de hierbas verdes y un toque de mandarina y ají amarillo. ¿Rico verdad? Pues aquí no acaba la cosa: Diego prepara como nadie el ceviche de pato; el pollo a la brasa adobado con romero; el cerdo macerado en canela y ají panca; la parihuela, que es una sopa de pescado; el aguadito de pollo, típico de las fiestas navideñas; el tacacho de la selva con langostinos (en la foto de abajo); el locro de langostinos y camarones; los ceviches, los tiraditos. Y tantos platos más.
Yo después de este sabroso y enriquecedor viaje gastronómico por el Perú, y como es costumbre en mi país, me voy a dormir la siesta o, como dirían aquí en Colombia, llegó la hora de la lochita. Pero antes ¿quieres que te reserve una mesa en el "Peruviano"?
Peruviano
Calle 71 / 5-75. Bogotá
Reservas: 3177410
Reservas: 3177410
Antes de nada, veo que le diste un toque de color al fondo del blog, "me gusta" :)
ResponderEliminarBueno, y sobre la entrada te cuento que nunca he tenido la oportunidad de saborear comida peruana, seguro que todo está para chuparse los dedos... así que me puedes ir reservando una mesa... para ir contigo claro :)
Un beso español con corazón colombiano.